sábado, 26 de octubre de 2013

EL ARTE DE NO ENFERMARSE



 Dr. Dráuzio Varella 


Si no se quiere enfermar; hable de sus sentimientos. Las emociones  y sentimientos que están escondidos y reprimidos, terminan en  enfermedades como: gastritis, úlcera, dolores lumbares, dolor en la  columna.  Con el tiempo, la represión de los sentimientos degenera  hasta el cáncer.  Entonces, vamos a sincerar, confidenciar,  compartir nuestra intimidad, nuestros secretos, y nuestros  errores.  El diálogo, el hablar, la palabra, es un poderoso remedio  y una excelente terapia. 

Si no se quiere enfermar; tome decisiones.  La persona indecisa  permanece en duda, en la ansiedad, en la angustia.  La indecisión  acumula problemas, preocupaciones, agresiones. La historia humana  es hecha de decisiones. Para decidir es preciso saber renunciar,  saber perder ventajas y valores para ganar otros. Las personas  indecisas son víctimas de dolencias nerviosas, gástricas y  problemas de la piel. 

Si no se quiere enfermar; busque soluciones.  Las personas  negativas no consiguen soluciones y aumentan los problemas.   Prefieren la lamentación, la murmuración, y el pesimismo.  Es mejor  encender un fósforo que lamentar la oscuridad.  Una abeja es  pequeña, pero produce lo más dulce que existe.  Somos lo que  pensamos.  El pensamiento negativo genera energía negativa que se  transforma en enfermedad. 

Si no se quiere enfermar; no viva de apariencias.  Quien esconde  la realidad, finge, hace poses, quiere siempre dar la impresión de  estar bien, quiere mostrarse perfecto, bonachón, etc., pero está  acumulando toneladas de peso.  Una estatua de bronce con pies de  barro.  Nada peor para la salud que vivir de apariencias y  fachadas.  Son personas con mucho barniz y poca raíz.  Su destino  es la farmacia, el hospital, y el dolor. 

Si no se quiere enfermar; acéptese.  El rechazo de sí mismo, la  ausencia de autoestima, hace que nos volvamos ajenos de nosotros  mismos.  Ser uno mismo es el núcleo de una vida saludable.  Quienes  no se aceptan a sí mismos, son envidiosos, celosos, imitadores,  competitivos, destructivos.  Aceptarse, aceptar ser aceptado,  aceptar  las críticas, es sabiduría, buen sentido y terapia. 

Si no se quiere enfermar; confíe.  Quien no confía, no se  comunica, no se abre, no se relaciona, no crea relaciones estables  y profundas, no sabe hacer amistades verdaderas.  Sin confianza, no  hay relacionamiento. La desconfianza es falta de fe en sí, en los  otros y en Dios. 

Si no se quiere enfermar; no viva siempre triste.  El bueno humor,  la risa, el reposo, la alegría, recuperan la salud y traen larga  vida.  La persona alegre tiene el don de alegrar el ambiente donde  vive. "El buen humor nos salva de las manos del doctor".  La  alegría es salud y terapia. 

Recuerde que nuestro cuerpo físico es reflejo de nuestra salud  mental y emocional por lo que la salud empieza en su cabeza y en su  corazón.


viernes, 25 de octubre de 2013

Que es Namasté?

Namasté es una palabra de origen sánscrito, es una expresión de saludo de Asia del Sur, originado en India, utilizado como un hola y un adiós en nuestro idioma acompañado normal­mente de la inclina­ción de la cabeza hacia adelante, con ojos cerra­dos y con las palmas de las manos juntas a la altura del pecho.
El gesto es el reconocimiento de un alma a otra y representa la creencia de que cada uno de nosotros tiene una chispa divina en su inte­rior localizada en el chakra del corazón.

Namasté significa también:
  • Yo honro el lugar dentro de ti donde el Universo entero reside.
  • Yo honro el lugar dentro de ti de amor y luz, de verdad y paz.
  • Yo honro el lugar dentro de ti y cuando tú estás en ese punto tuyo, y yo estoy en ese punto mío, somos sólo Uno.
NAMASTÉ